¿Qué tiene que ver la última ola de frío que ha experimentado Chicago en el mes de enero con un coche Tesla y con la transformación digital de las empresas?

Xavier Delgado

 

Chicago registró el pasado mes de enero temperaturas inferiores a los -20ºC y una sensación térmica hasta 10 grados inferior. Los habitantes de Chicago están acostumbrados a que esta clase de fenómenos meteorológicos -incluida la nieve- provoquen la cancelación de vuelos y atascos kilométricos en las autopistas. A lo que no estaban tan acostumbrados -hasta ahora- es a contemplar “cementerios” de coches eléctricos incapaces de arrancar debido al frío. Es en eso en lo que se han convertido las estaciones de carga de Tesla en la ciudad de Chicago.

 

 

El punto débil de los supercargadores de Tesla, se han convertido en el estándar de carga más importante de EE.UU., es que reducen su rendimiento de forma notable cuando los termómetros descienden por debajo de los 0ºC. No solo eso, sino que, además, -y según diversos estudios- la autonomía de los coches eléctricos se ve reducida hasta un 40% cuando la temperatura es inferior a los 0ºC. ¿Cómo hacen los países nórdicos para evitar situaciones como éstas? Prima la recarga en casa.

 

En España dudo bastante que veamos fenómenos tan extremos de frío como el acaecido en Chicago - ¡si hasta la nieve escasea! - así que los propietarios de un automóvil Tesla pueden estar tranquilos. Aquí, en nuestro país, tenemos otro problema...PUEDE SEGUIR DISFRUTANDO DE LA LECTURA DE ESTE ARTÍCULO, DE MANERA GRATUITA Y SIN RESTRICCIONES, MEDIANTE EL SIGUIENTE ENLACE DE NUESTRA REVISTA ONLINE https://www.smartfactorymagazine.es/revista/1/index22.html

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