Robótica al servicio del olivar tradicional
25/02/2025CATEGORíA: General
Con el objetivo de ayudar a los agricultores a reducir el tiempo y los costes de la cosecha de aceitunas en el campo, se ha desarrollado Robolio, una solución automatizada que permitiría realizar la recogida de forma independiente, las 24 horas del día, compensando las dificultades de la mano de obra
Desarrollado por dos empresas de aceitunas italianas, el proyecto en particular surge de la necesidad de automatizar y hacer más sostenible económicamente el proceso de cosecha de aceitunas que afecta al 30 o 40% en costes de producción a las zonas más desfavorecidas de la Toscana, teniendo en cuenta que en la región hay 4 millones de olivos abandonados.
"Uno de los mayores problemas del cultivo tradicional de la aceituna es el alto coste de la cosecha manual. El otro factor crítico está representado por el tiempo: las aceitunas deben estar flanqueadas unas horas después de la cosecha para obtener un producto de calidad y con la cosecha manual no siempre es posible", explica Iacopo Gentilini, empresario de fábrica de la aceituna y propietario de la empresa Kali.
Gentilini es profesor de robótica en los Estados Unidos: "Mi formación en mecánica robótica combinada con mi pasión por el cultivo de la aceituna me ha llevado a buscar una solución alternativa y complementaria a la cosecha manual. Encontrar una fuerza laboral y tenerla disponible cuando sea hora de cobrar, teniendo en cuenta que el cambio climático puede anticipar o retrasar esta operación por días o semanas está siendo cada vez más complicado. De ahí la idea, gracias a la asociación de Yanmarés, de iniciar el desarrollo de un robot autónomo capaz de recoger aceitunas en los más variados topógrafos de plantas existentes en la Toscana. Actualmente, todavía no hay mercado, a diferencia del cultivo intensivo de aceituna, un robot para el tradicional. La máquina que estamos probando en el campo permitiría realizar la recogida de forma independiente, las 24 horas del día, compensando las dificultades de la mano de obra. Todavía estamos en las primeras etapas".
El colector autónomo utiliza el brazo de una pequeña excavadora, una máquina a menudo utilizado en granjas, como un verdadero brazo robótico, y está equipado con un agitador comercial correctamente sensorizado y un paraguas invertido para la recolección, componentes que se integran a través de software, herramientas, cámaras, sensores para permitir la cosecha sin dañar los frutos.
El mapeo digital de la planta, una información esencial para permitir al robot olivar identificar las características del olivo circundante, se hace a través de cámaras y teledistección reelaborada por inteligencia artificial, mientras que se ha desarrollado software particular y específico para recrear las condiciones espaciales circundantes. El robot se sigue probando y representa una primera aplicación práctica de combo robótico e inteligencia artificial en el sector oleícola tradicional.
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